CASA DEL FOTOGRAFO WOLFGANG
LUDES
Una casa de líneas arquitectónicas simples, en donde el interior fluye al exterior.
Como
respuesta a la adaptación a las altas temperaturas del lugar, se utilizan terrazas
cubiertas con pérgolas que garantizan sombra, frescura y confort.
El uso de postigos para cerramiento y la gran
altura de los techos ayudan a mantener el ambiente fresco y ventilado, aprovechando
las brisas del lugar.
El uso de
materiales propios del lugar crean una mimetización con el paisaje.
Los pisos son
de travertino crudo, en las paredes piedra de Bali y madera oscura en todos los
techos.
La piedra parece
entrar por la ventana del baño y forma parte del baño junto a la bañera.
Magnificas
vistas desde toda la casa y la pileta de borde infinito.
Fuente
: architecturaldigest