Esta casa forma parte de una antigua masía del siglo XIV, está situada
dentro del casco antiguo de la localidad de Madremanya, en Girona. Sus
propietarios la reformaron para convertirla en Can Bassa, un encantador
alojamiento rural, formado por varias construcciones, donde esta casa se llama “Los
Angels”.
Originalmente no tenía baños ni cocina solo varias habitaciones
distribuidas en las tres plantas, se cree que las habitaciones eran usadas por trabajadores
de los campos. La rehabilitación fue respetuosa con los muros de piedra
originales y vigas de madera.
La sala de estar se encuentra en el segundo piso, para disfrutar de las
vistas y sentir la presencia de las montañas de Les Gavarres, la terraza era el
antiguo secadero.
En la primera planta se encuentra el dormitorio con baño, en lo que era el altillo
se diseñó una habitación con dos camas, el acceso era por medio de una escalera
trampa, pero para hacerlo más accesible se cambió la escalera, logrando un
ambiente muy acogedor.
Fuente: micasarevista.com