martes, 7 de mayo de 2013

JUEGO DE PLACAS Y COLORES EN UN LOFT DE MADRID


Se trabajó sobre un espacio donde, hacia principios del S XX, funcionaba el taller de un artista. Se lo reacondicionó para su nuevo destino, vivienda, respetando las características propias del lugar.


Como elementos existentes más significativos, se conservaron las cerchas metálicas de la estructura que sujeta el techo al igual que el entablonado de madera y se renovó la cubierta de chapa de zinc previa colocación de aislación térmica acorde a los requerimientos.


Al remover los revoques de los muros medianeros y dejar al descubierto el ladrillo, se le aporta color y textura inimitables.


Dos paramentos enfrentados, orientados al N y S, totalmente vidriados le garantizan una excelente iluminación, ventilaciones cruzadas y aseguran la aislación térmica dado que han sido utilizados paños vidriados tipo DVH.


Así planteada la envolvente que contiene el gran espacio, se le introdujeron en su interior, placas que funcionan como tabiques, espacios de guardado y entrepiso y que son las encargadas de definir los distintos sectores. A esto se le suma el uso del color que le da mayor protagonismo a las mismas. Este conjunto de elementos crea un cambio en la escala de los espacios, genera recorridos y quiebre de las visuales, enriqueciendo la propuesta.


Se complementa con un balcón y una terraza equipados para el descanso, hacia donde se proyecta el espacio interior.
Fuente: beriotbernardin; arquimaste.