Si bien la imagen responde
estéticamente a la de un típico loft, por sus materiales y terminaciones, morfológicamente
y conceptualmente no lo es.
Se trata en este caso de un
pequeño departamento monoambiente donde se aprovecharon muy bien los pocos m2
que posee y se lo ambientó de un modo no demasiado convencional, tratándose de
un antiguo edificio del casco histórico de Kiev. Partiendo de la estética de un
loft, donde se mezclan materiales originales, con otros nuevos, producto de la intervención,
dio por resultado esta combinación de antiguos muros de ladrillo a la vista con
otros de terminación brillante que rematan con vidrio en la parte superior, como
se ve en el muro que contiene al dormitorio, blanco por fuera y gris oscuro por
dentro.
Aprovechando que contaban con cuatro
altos ventanales, se dividió el ambiente para crear el dormitorio de tal manera que tanto el cuarto como el
estar quedaran bien iluminados y ventilados con dos ventanales cada uno.
Todo gira en torno a la cocina
que si bien está incorporada al estar se ubica de modo tal que se la puede
rodear, evocando en cierto modo al antiguo criterio de los países nórdicos
donde la cocina es el corazón de la casa.
Se completa el estar con una
tarima sobre elevada donde se aloja el estudio y una gran biblioteca,
totalmente realizado en tablero OSB, lo que suma rusticidad al proyecto y
funcionalmente le aporta un gran espacio de guardado.
Se cuidó que la iluminación
artificial fuera difusa y tenue en todo el departamento, inclusive en el baño.
Fuente: alexbykov.net
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