En la región
de Auge, en Normandía, se encuentra esta antigua y rustica casa Francesa.
Funciona
como estudio y vivienda de un artista.
Al estar
apoyada sobre pilares, queda conformada, en parte, una galería.
La
ambientación, sigue la línea rústica de su arquitectura, lo que nos retrotrae a
otro tiempo.
A esto, se
le agrega un cierto aire bohemio, que se percibe apenas ingresamos a la
vivienda.
En cuanto a
los materiales y colores, reina la madera, los tonos ecológicos y neutros, como
el blanco.
Gran
cantidad de objetos de uso doméstico de antaño, se hallan expuestos en estantes
y mesas antiguas, del mismo modo que las piezas de arte.
En la
terraza, nexo entre el exterior e interior, se vive el mismo clima que en el
interior, lo que lleva a la meditación
y relajación.
Arcos y
paredes blancas dan una sensación acogedora y agradable.
La luz natural que se filtra por las ventanas,
sobre todo en la parte superior de la casa, es otro elemento más que contribuye
a lograr un ambiente armónico y sereno, en comunión con cada uno de los
detalles que hemos nombrado