Kawelluco, IX Región, Chile
De
medidas casi mínimas y evocando el modelo de galpón tradicional del sur de Chile,
esta Casa-Granero es el resultado de la síntesis del diálogo entre el territorio
y una arquitectura que no busca irrumpir en el paisaje, sino sumarse a él.
El
espacio interior está contenido por una piel de madera que lo envuelve y lo
conecta con el paisaje a través de los aventanamientos y la naturaleza misma del
material.
Su
interior, un gran espacio de doble altura, donde se integran las áreas públicas
con el sector más privado de la planta superior.
La Arq. Cazú Zegers, a quien pertenece esta
obra, fundó una manera particular de ocupar el territorio. Sus propias palabras
lo confirman, cuando dice:
“Los
monumentos son a Europa como el territorio es a América”.
Dice
de su obra el Arq. Hernán Cruz, de la Pontificia Universidad Católica de
Valparaíso:
“A diferencia de los arquitectos, que
andamos en la construcción de límites, cercando
los territorios, una mujer se instala en la naturaleza desde los sentidos,
desde lo próximo a su cuerpo. Por ello unas hojas,
el agua de vertientes, unas piedras al ser observadas y dibujadas
son el inicio de un primer gesto–palabra que viene a señalar cómo debiera ser la Obra”.
Fuente: CAZÚ ZEGERS prototipos en el territorio
