Se
trata de un monoambiente de muy pocos metros, pero pese a esto se ha logrado
optimizar de tal manera la superficie disponible, que se obtuvo como resultado
una excelente solución para una primer vivienda de una persona sola o en
pareja.
Nada
se incorporó sin ser previamente pensado y diseñado a medida. Por eso no vemos aquí
un equipamiento estándar y convencional, cada cosa es especial para el lugar
que iba a ocupar y para la función para la cual fue pensada. Es por eso que no
falta en este departamento, nada de lo que se necesita para vivir
confortablemente. Existe un espacio para estar y disfrutar de una película o de
una charla con amigos en un cómodo sofá, un espacio de cocina bien distribuido
y equipado, un sector de trabajo o estudio para tareas intelectuales o de oficina,
un espacio para el descanso y la privacidad con un dormitorio bien resguardado
de las vistas, y un cómodo cuarto de baño. Todo esto, con el agregado de una
excelente iluminación y ventilación tanto artificial como natural (generosas ventanas
en el ambiente y el baño), y con una batería de armarios, cajones y estantes
que le aportan amplias superficies de guardado tanto para ropa (en el cuarto), para
enceres y alimentos (en la cocina), como para libros carpetas y objetos de
entretenimiento (en el estar).
Acompaña
a este conjunto de virtudes, una acertada elección de colores aplicados en los
textiles y los objetos decorativos, que combinados con la madera clara y el
blanco que predomina en su arquitectura, hacen de este monoambiente un espacio amplio,
confortable y placentero.
Fuente: contemporist.com
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