La luminosidad y claridad son características que predominan en esta casa Madrileña.
El living esta ambientado
con muebles actuales y clásicos, como el capitoné, la chaise longue, lámparas barrocas y cortinas de lino. El toque de color lo dan los accesorios
en tonos pasteles y tierras.
El comedor de líneas simples y serenas, tiene un mirador desde el que se contempla el paisaje.
El dormitorio también se abre al jardín,
dejando entrar el aroma del campo. Los ventanales con vidrio repartido enmarcan
el paisaje. Un ambiente calmo donde el blanco invita a la relajación.