En el corazón de la región vinícola del Penedès, a sólo 35 km de Barcelona, con vistas a los viñedos y olivares más bellos de España y como telón de fondo las montañas de Montserrat. Con un patio hermoso para descansar y disfrutar.
La arcada que nos conduce a la cocina por sus dimensiones
nos invita a entrar, mostrándonos los techos de bovedillas de ladrillos
originales, se dejaron las puertas dobles que dan al jardín pero se
refuncionalizaron, agregándole una carpintería exterior para poder disfrutar de
las vistas.
En el dormitorio bien romántico se dejó una
mirilla en la cabecera de la cama.
Fuente: homebunch.com
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