En un edificio victoriano de Kensington,
Londres, se rescató este departamento sobre el cual en otro tiempo se realizó
una intervención que según los arquitectos destruyó gran parte del patrimonio arquitectónico
del lugar.
Se lo había dividido de manera
tal que convirtieron la sala y los cuartos en pequeños espacios de dimensiones
desproporcionadas, ambientes estancos, oscuros y casi laberínticos. Pero además
se lo despojó de todo elemento ornamental propio de su estilo victoriano, con
los que contaba desde su origen.
Por eso se puso gran énfasis en
liberar la sala, recuperar su amplitud original y si bien no se reconstruyeron
los elementos ornamentales originales, sí se recuperaron los ventanales, sus
celosías y los balcones con exquisitas barandas de hierro, tal como era en un
principio.
Se adoptó para su
interior, una resolución minimalista, de materiales sencillos, muros blancos y
madera de roble, que aportan una neutralidad que contribuye a enfatizar el
espacio tal como fue concebido. Espacialidad dada por los altos techos, los
ventanales que acompañan tanto en sus dimensiones como en su diseño, y la
recuperación de la luminosidad que se ve aumentada gracias a la paleta de
colores elegida.
Dado que la reconstrucción
se planteó a partir de un estilo de vida totalmente contemporáneo, los
arquitectos optaron por flexibilizar los espacios cosa que se ve materializada
con la incorporación de una cocina integrada y un entrepiso, que no invade el
espacio y muy por el contrario logra una continuidad espacial que optimiza el
resultado.
Así reciclado, el departamento cuenta
finalmente con un espacio dinámico y flexible que incluye estar comedor cocina,
con un balconeo desde el estudio o dormitorio de huéspedes que cuenta con un
elemento plegable pensado especialmente para darle privacidad de ser necesario.
Además cuenta en el sector de atrás, con tres cuartos, los cuales mediante una
placa de madera que pivotea sobre un eje quedan separados del sector público de
la vivienda.
Se puede decir entonces que esta
modificación ha logrado recuperar ese espacio victoriano, con un criterio
respetuoso por lo original pero logrando satisfacer las necesidades, los gustos
y las tendencias de la vida actual.
Fuente: archdaily.com
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